lunes, 7 de febrero de 2011
Rollo de carne relleno
ROLLO DE CARNE RELLENO Ingredientes * 1/2 kg. de carne de cerdo picada * 1/2 kg. de carne de res picada * 3 huevos duros * 1 zanahoria (previamente cocida) * Una copa de vino blanco * 3 tomates grandes * 3 rebanadas de pan de molde mojada en leche * 1 cebolla mediana * 3 dientes de ajo * Aceite y sal * 1 paquete de aceitunas sin hueso * 1 cucharada de mantequilla * 4 cucharadas de pan rallado * Jamón serrano o bacon * 250 gr. de agua tibia Preparación Se mezclan las tres clases de carne con la miga de pan mojada en leche, se adoba con la sal, el ajo y perejil machacados Se le une la cebolla picada muy pequeñita, se rectifica de sal y se le añaden las cuatro cucharadas de pan rallado Se mezcla todo bien para que quede homogéneo Se extiende la carne un poco y se alinea con las zanahorias y las aceitunas Se enrolla y se mete un huevo (previamente cocido) por cada lado, ocultándose entre la carne Este rollo se dora en abundante aceite Se retira se deja enfriar un poco y se envuelve en lochas de jamón serrano ( o bacon) Poner a dorar la mantequilla en el mismo caldero donde se ha puesto la carne ya cubierta Añadirle la pulpa de los tomates y un poco de perejil Salpimentar ligeramente y añadir el agua tibia Cocer a fuego lento con el caldero tapado, durante unos 40 minutos Añadir el vino y dejar 10 minutos más |
Filetes de pavo con salsa de puerros
Filetes de Pavo con Salsa de Puerros Ingredientes 1/2 kg de pechugas de pavo (se puede sustituir por pollo) 2 dientes de ajo 2 vasos de caldo de ave (puede ser caldo en pastillas o de sobre y etc...) Aceite Sal y pimienta Salsa de puerros 2 puerros 2 chalotas o 1 cebolla Caldo de ave (puede hacerse con caldo de sobre o pastillas) Aceite 50g de nata líquida 2 yemas de huevo Nuez moscada Pimienta Preparacion Salsa de puerros Limpia y corta en trozos pequeños los puerros y las chalotas Rehógalos en una sartén con aceite a fuego medio Añade la nuez moscada, la pimienta y el caldo de ave y déjalo cocer durante 5-10 minutos a fuego medio en un bol Bate la nata con las yemas de huevo y échalo poco a poco en el bol mientras remueves para que la salsa se vaya ligando La salsa no debe quedar ni muy líquida ni muy espesa En el primer caso, échale harina para que la salsa espese un poco Y si ha quedado demasiado espesa, échale más caldo a la salsa Salpimenta las pechugas de pavo Pela, corta y fríe en una sarten con un chorro abundante de aceite los dientes de ajo Cuando estén dorados echa las pechugas y fríelas a fuego fuerte Sirve las pechugas junto con la salsa Puedes acompañar este plato con setas a la plancha, espárragos trigueros o unas patatas cocidas |
Ensalilla de puré de patatas
Un corazón humilde
A menos que realmente la conozcas, la verdadera humildad es difícil reconocerla. Puede que las personas calladas y sin pretensiones parezcan humildes, cuando en realidad puede que se sientan intimidadas y estar ferozmente celosas de los demás. Puede que las personas con actitudes reflexivas y que rara vez ríen y que de hablar piadoso estén orgullosas de sí mismas por su piedad. O puede que aquellas que dan la impresión que “soy nada” están rogando por un cumplido o simplemente estén sufriendo de un complejo de inferioridad.
Por otro lado, a la auténtica humildad no se la reconoce fácilmente. Puede que la última persona de la que sospeches sea la más humilde. Podría ser el alma de la fiesta, la que se ríe más fuerte que cualquier otra persona, y la que disfruta la vida al máximo. La lección es que la humildad no puede medirse con apariencias externas ni con perfiles estereotipados del temperamento.La verdadera humildad comienza en el corazón, donde dos actitudes básicas la producen.
- La primera actitud trata con quién es la autoridad final en la vida. El orgullo resiste la realidad del derecho de Dios a tener la última palabra en la vida. Cuando Moisés reprendió a Faraón por no cooperar con los planes de Dios para Israel, dijo, “Así dice el SEÑOR, el Dios de los hebreos: “¿Hasta cuándo rehusarás humillarte delante de mí?” (Éxodo 10:3). Un corazón humilde es un corazón obediente (Filipenses 2:8). Reconoce el derecho de Dios a gobernar.
- La segunda actitud de verdadera humildad es reconocer que soy lo que soy, no por mis propias maquinaciones, habilidades, e intelecto, sino solamente por la bondad y la gracia de Dios. Un corazón orgulloso quiere tomar el crédito por nuestros logros. Pero la Palabra de Dios nos enseña que la posición, la riqueza, la salud, los bienes, y las capacidades son en última instancia, regalos de Dios. La humildad da el crédito donde hay que reconocerlo.
Es un pensamiento aleccionador recordar que Dios resiste a los orgullosos. Pero piensa en esto: Él le da gracia a los humildes (1 Pedro 5:5). Elige tú.
"La humildad fluye de un corazón que se ha acercado a Dios."
Reflexiona: 1. ¿Dónde me encuentro en la búsqueda de la verdadera humildad?
2. ¿De qué manera el ejemplo de Jesús me ayuda a comprender de qué se trata ser humilde?
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